viernes, 17 de julio de 2009

la tentacion de explicarme...


"Cuanto más tentado te veas, sábete que eres más amado. Nadie debe reputarse siervo de Dios hasta tanto que pase por las tentaciones y arideces".
(San Francisco de Asís)

Cada vez que leo al beato Rafael pienso en que todo eso que iba a decir, ya está dicho... y no hace falta insistir... pero al final caigo en la tentación de autoexplicarme... con lo bien que se está orando en silencio... en presencia del Señor... con la ayuda de nuestra Madre, la Virgen del Carmen, la estrella del mar...

Sólo Dios... Sólo Dios... Sólo Dios...

4 comentarios:

Unknown dijo...

He entrado por las fotos, sinceramente. Me han dejado traspuesto. Quiero decirte que, aunque quizá no sea el blog más adecuado, estoy haciendo promoción de un libro que me gustaría recomendarte. Esto me lo he tomado como una especie de cruzada porque creo en su autora, que es una persona que conecta con las personas y sabe transmitir sentimientos universales. Pero eso sí, no cuenta con el suficiente apoyo publicitario. Su novela, que acaba de publicar y presentar en madrid con éxito absoluto se llama Treinta y siete minutos en el atasco. Según ella, los atascos le han hecho comprender la vida mejor. No los entiende como un tiempo desperdiciado. Me gustaría saber qué piensa una persona tan espiritual como tú de una novela como ésta, en que la dialogan la vida, la muerte, el tiempo y el amor. Me encantaría, la verdad. Dejo mi mail para ello.
¡ aH! La autora del libro se llama Macarena Márquez y la editorial es Hera Ediciones.
Un saludo. Y me alegro de que haya gente como tú, que escribe así, y que ama así.Un saludo. Víctor.

Juan dijo...

jmp:

Gracias por tus comentarios en mi blog. He leido el tuyo y me parece un excelente sitio para divulgar la palabra de Cristo.

A eso tengo mi blog dedicado, a que en este mundo materialista y perdido se escuche a Cristo cada vez en mas partes. Estamos en unos tiempos difíciles. Siempre lo fueron para los cristianos, pero ahora el castigo se avecina.

La Iglesia sobrenatural, la que formamos la comunidad de todos los fieles en oración, ayuno y penitencia, es la única que tendrá fuerza para que la tierra no caiga en manos del Demonio.

Guerrera de la LUZ dijo...

Sí cielo, pero el caso es que hay muchas cosas que es necesario explicar a los demás, no crees?

Pienso que cada uno tiene su misión.

Muchos besos. Reza por mí por favor. Y yo por ti.

jmp dijo...

Guerrera, la tentación de explicarme o autoexplicarme, va más con la necesidad que a veces padezco, de tratar de resumir, de reunir en un solo texto los problemas tal y como yo los veo... y de intentar, con mis solas fuerzas, explicar las soluciones a todo el mal que nos rodea... me pregunto ¿¿¿como es posible que la gente no lo vea???... como siempre, mis intentos se quedan en copiar y pegar extractos de e-mails y otras cosas que encuentro por mi ordenador... que al juntarlos, ni yo mismo entiendo... pero me gusta ponerlos aquí y leerme y ver mi incapacidad, y como caigo una y otra vez... y como vuelvo al redil con la cabeza gacha...
por supuesto que entiendo que hay cosas que es necesario explicar y que cada uno tiene su misión... por supuesto que rezo por tí, ya lo sabes... Graciaaassss

Juanjo, gracias por tu visita y comentario en este breve espacio... aunque no siempre deje coments, hace tiempo que visito y disfruto con lo publicas en tu blog, creo que estamos muy de acuerdo en muchas cosas... como en la fuerza de la oración, el ayuno y la penitencia... gracias again. Un abrazo en Cristo.

Victor, creo que tienes razón en lo de que este no es el blog, ni yo la persona más adecuada, ojalá fuera más espiritual y consiguiera amar como el Señor espera de nosotros... pero tomo nota del libro, seguro que es interesante y más en los tiempos en los que vivimos, una novela que trate de algunos de los temas importantes de nuestra vida... me alegra que te gusten las fotos... ahí mi participación es mínima y la única intención, en la medida de mis posibilidades, es tratar de dar Gloria a Dios... Gracias por tu visita y comentario. Un saludo.