jueves, 18 de junio de 2009
un lapsus en el silencio...
le conoces de toda la vida, y un día de pronto suena de otra manera y miras hacia ese otro lugar y te encuentras ante quien siempre estuvo a tu lado, cada uno sabemos quien es... y aunque guardemos algún reproche, aunque le restemos valor... siempre ha estado ahí...
(todo esto viene después... antes, mi mirada se posó ante el Cristo que me acompañó cada instante, cada milímetro de mis últimas penurias, sin pedirme nada a cambio, sin más... enseñándome a amar como nadie ha amado jamás...)
y ahora tú... vida diaria..., me pides que le olvide o le traicione... que le deje como mucho para el Domingo, que no sea un esclavo, a todas horas pendiente de su mirada... y no te das cuenta o no quieres darte cuenta de que es al revés... que es Su mirada la que me hace libre...
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2 comentarios:
Ohhhhhhhhhhhh¡
Bello. Muy bello y MUY verdad.
Gracias Guerrera...
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